Todos tenemos un cuerpo de energía o aura, que se aferra a patrones o firmas vibratorias, ya sea que nos sirvan o no. Muchas personas creen que nuestros cuerpos terminan en la superficie de nuestra piel, pero la ciencia demuestra lo contrario. Si uno sana los patrones físicos y emocionales, pero no tiene en cuenta el patrón del cuerpo de energía, existe la posibilidad de que el problema regrese o no se cure por completo.
He observado muchas veces que la gente practica yoga, meditación, oración e invocaciones, todo con buenas intenciones. Sin embargo, si los programas del cuerpo físico están neurológicamente desorganizados, a veces puede ser difícil mantener el patrón de energía o la frecuencia áurica deseada, por así decirlo.
Prefiero completar primero el Técnica de Organización Neural procedimientos para asegurarse de que los componentes físicos/neurológicos estén en orden. Entonces puedo proceder a restablecer los patrones energéticos.
Muchas veces después de hacer un tratamiento corporal físico, el desequilibrio energético se reestablecerá y viceversa. Animo al paciente a que continúe haciendo la limpieza diaria de su campo de energía usando mi Invocación de Atención e Intención y leer Capítulo 6 de mi libro Let It Flow.
Usa lo que te funcione, pero lo importante es usarlo y hacerlo con frecuencia como una práctica para mantener el equilibrio, no solo cuando estés en crisis.